
Adriana Rodríguez Molano
Analista política, Máster en Sociología política y política comparada de la Universidad París 10 Nanterre y Máster en Análisis de problemas políticos, económicos e internacionales contemporáneos de la Universidad Externado de Colombia.
•
El pasado 18 de marzo, acompañé la multitudinaria manifestación que hubo en Bogotá, convocada para defender las reformas propuestas por el Presidente Gustavo Petro y promover la aprobación por parte del Senado de la Consulta Popular.
Hice reportería gráfica y recogí algunas opiniones de quienes participaban. Una de las manifestantes, María Fernanda, dio una entrevista/testimonio que se ganó mi corazón, por la simplicidad, la espontaneidad y la tremenda sabiduría implícita en sus palabras.
Petro y las reformas sin la gente no es nada. El progresismo sin la gente no es nada, es letra muerta. Una sociedad empoderada es gente que progresa. Todo esto tiene su razón de ser cuando la gente toma conciencia de lo que ha de ser este país, de los cambios que se han de generar. Si no estamos con la gente, si la gente no está, el cambio no tiene sentido.
Ahí está el despertar, el despertar que necesitamos para generar empatía, para generar amor hacia aquellos cuyos derechos han sido pisoteados históricamente en Colombia. A partir de ahora lo serán cada vez menos, “hasta que la dignidad se haga costumbre”, como dice la vicepresidenta Francia Márquez. Esto significa progresismo, progresar, es una sociedad que progresa.
Deja una respuesta