De Dudamel para Petro


Víctor Solano Franco

Comunicador social y periodista


  1. El valor del talento oculto: Dudamel nos enseña que el talento puede estar en cualquier lugar, incluso en aquellos lugares donde nadie lo ve. Para este gobierno sería muy importante que se encuentre el talento no solo en las filas que lo llevaron en su campaña a ganar la Presidencia. Hay talentos que hoy podrían parecer ocultos en distintas áreas y que podrían servir al país si se construye equipo con criterio técnico y no únicamente político.
  2. La importancia de la motivación: Saber motivar a sus jugadores en el camerino y hacerles creer en sí mismos. En el gabinete de ministros se ha visto como varios de sus primeros alfiles se bajaron del bus, básicamente porque se desmotivaron al ver que sus opiniones no tenían eco en las decisiones del alto gobierno. Si el presidente aprende a motivar mejor, seguramente tendrá más estabilidad en la configuración de sus equipos de trabajo y así sus colaboradores puedan dar lo mejor de sí mismos.
  3. La apuesta por el trabajo en equipo: El venezolano creó un equipo unido y comprometido en el que todos los jugadores aportan su granito de arena. En el poder ejecutivo se podría apostar por el trabajo en equipo con los otros poderes, sin que eso represente perder la independencia. El trabajo en equipo es esencial para alcanzar el éxito y así obtener ‘la milla extra’ para toda Colombia.
  4. Asumir el liderazgo: Dudamel es un líder nato que inspira a sus jugadores y les da la confianza que necesitan para triunfar. En el gobierno, un buen líder es fundamental para guiar el país hacia la competitividad, la innovación y el bienestar de todos los colombianos. Para ello, todos los servidores públicos deben llegar a sentir que su líder es coherente y consistente para que así puedan seguirlo con convicción y no únicamente para cuidar su puesto. Ojo: Ser un líder es convertirse en un facilitador, no en una figura mesiánica.
  5. La importancia de la comunicación: Dudamel es un buen comunicador que se asegura de que sus jugadores sepan lo que se espera de ellos. Al presidente Petro le gusta muchísimo hablar, pero eso no necesariamente es saber comunicar. Cuando se disparan tantos mensajes y muchas veces estos ser perciben inconexos o únicamente con un propósito confrontacional, los funcionarios se confunden y los ciudadanos dejan de ver credibilidad en sus pronunciamientos. La comunicación también es esencial para evitar malentendidos y fomentar la colaboración.
  6. El papel de la disciplina: Un entrenador disciplinado exige a sus jugadores que den lo mejor de sí mismos y para ello debe dar ejemplo. ¿Cómo a un servidor público se le puede pedir, por ejemplo, puntualidad si el máximo líder va consolidando su fama de incumplido evento tras evento? En el mundo gubernamental, la disciplina también es esencial para mantener un ambiente de armonía y confianza en el Ejecutivo.
  7. La determinación de la toma de decisiones: Tomar decisiones difíciles es una exigente tarea diaria, como la de qué jugadores alinear y qué tácticas utilizar. En cualquier gobierno es clave elegir funcionarios con criterios técnicos y no clientelistas para que después no estén protagonizando escándalos. También es importante que la toma de decisiones no se dé sobre el vaivén de la opinión pública para no perder popularidad en las encuestas, sino con lealtad a una agenda técnica y al criterio de los expertos por encima de los políticos.
  8. La importancia de la perseverancia: Dudamel no ha renunciado a sus objetivos a pesar de los desafíos que ha enfrentado esta temporada como un presupuesto limitado. El presidente Petro puede seguir insistiendo en sus proyectos de reformas pero no debería salir a quejarse ante la ONU de que hay ‘golpes blandos’ o que el Estado colombiano está incumpliendo sus compromisos porque él es la cabeza del Estado. La perseverancia es eso, no es sinónimo de terquedad.


3 respuestas a «De Dudamel para Petro»

  1. Avatar de Carlos Gutiérrez Cuevas
    Carlos Gutiérrez Cuevas

    El respaldo robusta de la organización Ardilla Lulle con todo su poder financiero, mediático, administrativo y político hace a éste equipo de «Bucaramanga” ,como a todos los del ”futbol rentado colombiano».

    Hábil contorsionismo ese de comparar un entrenador –empleado en última instancia de los dueños del emporio–, con el intelectual que hoy ocupa la presidencia del país.

    El esfuerzo del articulista se plasma en unas «lecciones» de manual de autoayuda. No alcanza a ocultar su antipatía por Petro con cierta simpatía por la «mano dura antivenezolana» del alcalde bucaramangueño.

    Mano dura y patadas al balón se imponen como insignia en la Rodolfoneta población que se resiste a sumarse al cambio. RCN gana aquí por amplio margen

    1. Avatar de Mario Jimenez
      Mario Jimenez

      Hay que ser muy petrista (de los fanáticos) para no haber entendido la columna.

  2. Avatar de Edguitocar
    Edguitocar

    El texto me parece tan primario que no atino a elegir entre la risa y la sanción. La complejidad del juego del futbol es infinitamente simple, frente a la de gobernar un pais contradictorio. Pero hay algo por rescatar: el “realismo lúdico”.

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